Un estudio forense estableció que Tohá, que fue ministro de Defensa e Interior del presidente Allende (1970-1973), murió por “asfixia por estrangulamiento manual de naturaleza homicida” y no por suicidio por ahorcamiento como aseguró la dictadura.
Además de la exhumación del cadáver, la Justicia dispuso la recomposición del escenario de la muerte del político socialista chileno, ocurrida el 15 de marzo de 1974 en el Hospital Militar de Santiago.
Tohá había sido trasladado al centro sanitario castrense tras debilitarse su salud por las torturas sufridas en prisión y en la Isla Dawson, donde la dictadura confinó a altos cargos del Gobierno depuesto en el golpe militar del 11 de septiembre de 1973.
Ambas pericias, además de otras 25 diligencias, fueron resueltas por la Corte de Apelaciones de Santiago, que ordenó al juez del caso, Jorge Zepeda, reabrir la investigación, que el magistrado había cerrado sin llevarlas a cabo.
La hija de la víctima, Carolina Tohá, ex portavoz de la presidenta Michelle Bachelet y actual presidenta del Partido por la Democracia (PPD), dijo a Efe que “hace tiempo venimos pidiendo estas diligencias con nuestro abogado Nelson Caucoto, que ahora el juez Jorge Zepeda debe realizar y que son muy importantes”.
“Hay muchos elementos contundentes que demuestran que la versión oficial del suicidio es falsa y que fue un homicidio. Pero como familia también necesitamos saber quiénes son los responsables. Esperamos ahora tener acceso a nuevos testigos que nos ayuden a esclarecer la verdad”, añadió.
A su vez la viuda del dirigente, Moy de Tohá, afirmó que “estas diligencias que finalmente se realizarán son una nueva luz de esperanza para establecer la verdad y demostrar que no fue un suicidio”.
Un informe forense realizado por el experto Luis Ravanal, basado en un estudio de la autopsia de Tohá, determinó que murió por “asfixia por estrangulamiento manual de naturaleza homicida”.
Este informe coincide con otro que en 1974 hizo el médico criminalista de la Policía de Investigaciones Alfonso Chelén, primero en ver el cadáver de Tohá, quien también determinó que no hubo suicidio sino “muerte por estrangulamiento con participación de terceros”.
Ese informe le costó a Chelén su expulsión de la Policía civil.