domingo, 18 de abril de 2010

Estafas en consulados de EEUU Ciudadanos son víctima de múltiples delitos en esas dependencias en México

  • Claudia Nuñez/claudia.nunez@laopinion.com |
  • 2010-04-17
Robo de identidad, intimidación y extorsiones forman el vía crucis que sufren cientos de ciudadanos estadounidenses cuando viajan a consulados estadounidenses en territorio mexicano para tramitar la residencia o permisos legales a sus seres queridos.
En Ciudad Juárez, donde se localiza el consulado norteamericano más grande del mundo, un grupo de personas que se presentan como "asistentes consulares" hacen creer a los estadounidenses y a los aspirantes a la residencia que necesitan fotos o formularios especiales, para luego fotocopiar los expedientes de las personas y estafarlos con cantidades de 50 a 350 dólares.
En esa ciudad donde se procesa la cantidad más alta de permisos migratorios para extranjeros, número que al mes oscila entre 25,000 y 35,000 procesos, el llamado "coyotaje" ha ocasionado numerosos fraudes migratorios, confirmaron autoridades municipales a este medio.
"Es un negocio totalmente clandestino. Estas personas actúan fuera de la ley e incurren en estafas y extorsiones con los visitantes", dijo el portavoz del área de comunicación social del municipio de ciudad Juárez.
La Procuraduría Federal de Consumidor (Profeco) de esa ciudad destaca que son pocas las personas que acuden a esa delegación con la firme intención de denunciar a los extorsionadores, muchos por temor, ya que los estafadores se quedan con toda su información personal.
En 2007 el ex líder de la Profeco Carlos Camacho, quien fue asesinado por un comando armado, inició un programa que unificaba esfuerzos de la policía municipal, federal y estatal para acabar con el abuso y robo relacionados a los trámites consulares, sin embargo tras el asesinato del funcionario el esfuerzo quedó en el olvido.
Frente a la impunidad, las redes de estafadores hoy también se ubican en las dos únicas clínicas médicas autorizadas por la dependencia norteamericana para expedir los certificados de salud obligatorios para todo aspirante a la residencia.