Juez encierra a tres por tráfico ilegales
El tribunal de Servicios de Atención Permanente del juzgado de la Instrucción de Mao envió a prisión preventiva por tres meses, como medida de coerción, a tres hombres apresados por la Policía Nacional cuando traficaban desde Haití hasta la ciudad de Santiago a nueve haitianos indocumentados.
Es la primera sentencia que se conoce de un tribunal de la zona que sanciona a las personas encontradas culpables de tráfico de haitianos indocumentados hasta territorio dominicano, pues generalmente los responsables de esos hechos quedaban en libertad inmediatamente.
Juan Alberto Núñez, José Luis Rodríguez y Leopoldo Rafael Peña, de 50, 38 y 36 años de edad, respectivamente, fueron sorprendidos cuando se desplazaban por la carretera Guayubín-Mao-Santiago, en el minibús marca Nissan, de color blanco, propiedad del sindicato que cubre dicha ruta con 9 haitianos ilegales, cuatro niños, tres mujeres y dos hombres.
Los haitianos dijeron a los investigadores policiales que pagaron entre 3,500 y 4000 mil pesos para ser transportados desde Cabo Haitiano hasta Juana Méndez (Haití), localidad que está situada a 600 metros de Dajabón.
Asimismo, los adultos contaron que luego se las ingeniaron para cruzar la frontera y al llegar a Dajabón consiguieron ayuda para lograr su traslado a Santiago, el destino preferido de los haitianos, donde alegan que pagaron entre 800 y mil pesos para que los transportaran.
Michell Reveré, quien formaba parte del grupo de inmigrantes interceptado, dijo que al perder su casa en Puerto Príncipe donde vivía, se fue a vivir junto a sus hijos a Cabo Haitiano, su ciudad natal.
No obstante, explicó que allí las cosas están bien malas, porque no hay fuentes de trabajo.
Es la primera sentencia que se conoce de un tribunal de la zona que sanciona a las personas encontradas culpables de tráfico de haitianos indocumentados hasta territorio dominicano, pues generalmente los responsables de esos hechos quedaban en libertad inmediatamente.
Juan Alberto Núñez, José Luis Rodríguez y Leopoldo Rafael Peña, de 50, 38 y 36 años de edad, respectivamente, fueron sorprendidos cuando se desplazaban por la carretera Guayubín-Mao-Santiago, en el minibús marca Nissan, de color blanco, propiedad del sindicato que cubre dicha ruta con 9 haitianos ilegales, cuatro niños, tres mujeres y dos hombres.
Los haitianos dijeron a los investigadores policiales que pagaron entre 3,500 y 4000 mil pesos para ser transportados desde Cabo Haitiano hasta Juana Méndez (Haití), localidad que está situada a 600 metros de Dajabón.
Asimismo, los adultos contaron que luego se las ingeniaron para cruzar la frontera y al llegar a Dajabón consiguieron ayuda para lograr su traslado a Santiago, el destino preferido de los haitianos, donde alegan que pagaron entre 800 y mil pesos para que los transportaran.
Michell Reveré, quien formaba parte del grupo de inmigrantes interceptado, dijo que al perder su casa en Puerto Príncipe donde vivía, se fue a vivir junto a sus hijos a Cabo Haitiano, su ciudad natal.
No obstante, explicó que allí las cosas están bien malas, porque no hay fuentes de trabajo.
