Estaban camuflados en tanques llenos de aceite
para vehículos de motor y en cajas de artículos para cocina los 170
paquetes de cocaína, procedentes de Perú y Ecuador, ocupados anoche por
la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) en el puerto
Multimodal Caucedo, en Boca Chica, informó la agencia antinarcóticos.La
droga, que fue enviada ayer al laboratorio forense para ser analizada,
estaba distribuida en partidas de 110 y 60 paquetes, la primera hallada
en el contenedor número TOLU3106106, con destino a Charleston, en
Carolina del Norte, y la segunda en el furgón número GATU8503504, el
cual sería dejado en el país.
Los contenedores fueron bajados del buque Columba, el cual zarpó de los puertos de Paita, en Perú, y Guayaquil, en Ecuador. De acuerdo a un informe dado a conocer este sábado por la DNCD, el decomiso de los 170 paquetes fue encabezado por el mayor general Rolando Rosado Mateo, jefe del organismo.
Los 110 paquetes encontrados en el primer contenedor iban consignados a la Compañía Kuehne + Ángel Internacional LTD y los restantes 60 venían a nombre de la firma Dominican Internacional Forwaring, con oficinas en Santo Domingo. Estos fueron embarcados con artículos para cocina en Ecuador.
Un comunicado de la DNCD explica que el organismo amplía las investigaciones para determinar si la empresa consignataria de la carga tiene que ver con la operación de narcotráfico o si su contenedor fue utilizado por alguna red de narcotráfico internacional para introducir la droga a la República Dominicana.
Explica que la investigación está en marcha y que la DNCD y la Dirección General de Aduanas trabajan en forma coordinada para determinar quiénes son los dueños reales de esa droga y si un caso tiene que ver con el otro.
Revela que una de las unidades élites de la DNCD recibió informaciones “muy exactas sobre el embarque de los 170 paquetes de cocaína”, por lo que al inspeccionar los contenedores “los oficiales que acompañan al mayor general Rosado Mateo fueron directamente a los puntos donde estaban los paquetes”.
El magistrado Henry Arias, fiscal adjunto de la provincia Santo Domingo, certificó el hallazgo de la droga antes de trasladarla a la sede de la DNCD, desde donde fue llevada al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) parta determinar el peso definitivo y pureza de la misma.
Los agentes antidrogas fueron auxiliados por oficiales de la Dirección de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (J-2), de Aduanas, del Cuerpo Especializado de Seguridad Portuaria (Cesep), así como por miembros de seguridad de la terminal. El buque que transportó la droga es matrícula 1226N.
Los contenedores fueron bajados del buque Columba, el cual zarpó de los puertos de Paita, en Perú, y Guayaquil, en Ecuador. De acuerdo a un informe dado a conocer este sábado por la DNCD, el decomiso de los 170 paquetes fue encabezado por el mayor general Rolando Rosado Mateo, jefe del organismo.
Los 110 paquetes encontrados en el primer contenedor iban consignados a la Compañía Kuehne + Ángel Internacional LTD y los restantes 60 venían a nombre de la firma Dominican Internacional Forwaring, con oficinas en Santo Domingo. Estos fueron embarcados con artículos para cocina en Ecuador.
Un comunicado de la DNCD explica que el organismo amplía las investigaciones para determinar si la empresa consignataria de la carga tiene que ver con la operación de narcotráfico o si su contenedor fue utilizado por alguna red de narcotráfico internacional para introducir la droga a la República Dominicana.
Explica que la investigación está en marcha y que la DNCD y la Dirección General de Aduanas trabajan en forma coordinada para determinar quiénes son los dueños reales de esa droga y si un caso tiene que ver con el otro.
Revela que una de las unidades élites de la DNCD recibió informaciones “muy exactas sobre el embarque de los 170 paquetes de cocaína”, por lo que al inspeccionar los contenedores “los oficiales que acompañan al mayor general Rosado Mateo fueron directamente a los puntos donde estaban los paquetes”.
El magistrado Henry Arias, fiscal adjunto de la provincia Santo Domingo, certificó el hallazgo de la droga antes de trasladarla a la sede de la DNCD, desde donde fue llevada al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) parta determinar el peso definitivo y pureza de la misma.
Los agentes antidrogas fueron auxiliados por oficiales de la Dirección de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (J-2), de Aduanas, del Cuerpo Especializado de Seguridad Portuaria (Cesep), así como por miembros de seguridad de la terminal. El buque que transportó la droga es matrícula 1226N.
