NUEVA YORK (AP) — Un paquistaní, que sería el conductor del fallido  coche-bomba en Times Square, fue detenido la noche del lunes en Nueva  York por agentes del FBI y policías locales cuando pretendía salir de  Estados Unidos, informaron autoridades. 
   El sospechoso, Faisal  Shahzad, fue identificado alrededor de las 23:45 horas por agentes  aduanales en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy y fue detenido  antes de abordar un vuelo a Dubai en los Emiratos Arabes Unidos, dijo el  secretario estadounidense de Justicia, Eric Holder, y otros  funcionarios. 
   Shahzad está naturalizado estadounidense y  recientemente había regresado de un viaje de cinco meses a Pakistán,  donde tenía una esposa, de acuerdo con funcionarios que en la madrugada  del martes hicieron las declaraciones a The Associated Press a condición  del anonimato debido a la delicadeza de la investigación. 
    Shahzad está detenido en Nueva York y no se le podía contactar. Tenía un  domicilio en la ciudad de Shelton en el estado de Connecticut. Un  número telefónico registrado en esa dirección no estaba en servicio. La  policía procedió a registrar la casa. 
   El despacho de la  secretaría estadounidense de justicia en el Distrito Sur de Manhattan  llevará el caso. El despacho dijo que Shahzad comparecerá en corte el  martes para la presentación formal de las acusaciones, las cuales no  fueron anunciadas de inmediato. 
   Estados Unidos “no descansará  sino hasta que llevemos ante la justicia a todo responsable”, afirmó  Holder en Washington en una declaración que insinuó la búsqueda de otros  sospechosos. 
   De acuerdo con funcionarios policiales, Shahzad le  compró hace tres semanas en efectivo a un hombre de Connecticut la  furgoneta deportiva utilizada como carro-bomba, una Pathfinder 1993 de  Nissan. Los funcionarios hablaron a la AP en forma anónima por el  carácter sensible del caso. 
   Las autoridades detectaron el sábado  la camioneta, que no alcanzó a estallar pero produjo humo. Las  autoridades indicaron que la amenaza del carro bomba obligó la  evacuación de miles de turistas de varias calles en el área de Times  Square de Nueva York la noche del sábado. 
   La policía dijo que la  bomba pudo haber generado “una gran bola de fuego” y arrojado esquirlas  con la fuerza suficiente para matar a personas y destrozar ventanas. 
    El número de identificación del vehículo había sido retirado del  tablero, pero estaba estampado en el motor. La policía lo utilizó para  ubicar al propietario registrado. El descubrimiento fue un elemento  primordial en la investigación. 
   El vocero del Departamento de  Policía de Nueva York, Paul Browne, confirmó que los investigadores  habían hablado con el dueño registrado, pero rechazó hacer otros  comentarios al respecto. El propietario no fue identificado. 
   Las  autoridades también esperaban localizar a un hombre de unos 40 años que  fue grabado por una videocámara de seguridad mientras se quitaba una  camiseta cerca del vehículo de la bomba. El hombre llevaba otra camiseta  abajo. 
   En el video, el hombre mira hacia el vehículo mientras  echa humo y arroja junto a la camioneta la camiseta que se había  quitado. Según funcionarios, podría ser sólo un transeúnte. 
   En  Washington, el secretario de prensa de la Casa Blanca, Robert Gibbs,  dijo el lunes que el coche-bomba fue un acto terrorista. 
   El  motivo seguía siendo desconocido. El grupo extremista Talibán de  Pakistán pareció atribuirse la responsabilidad en tres videos publicados  el fin de semana después del descubrimiento del vehículo, dijeron  organizaciones de monitorización en internet. Funcionarios de Nueva York  afirmaron que la policía no tenía evidencias que sustentara esa  aseveración.lo pronto se ignora su el sospechoso detenido tiene relación  alguna con el Talibán paquistaní. 
   El carro bomba descubierto en  el corazón de Times Square era un mejunje de materiales corrientes —  fuegos artificiales, combustible y fertilizantes — que las autoridades  sospechan fue creado para provocar el máximo daño posible. 
   Al  final, el explosivo se consumió y la ciudad y sus residentes pudieron  considerarse afortunados: afortunados de que un vendedor ambulante viera  humo saliendo del carro aparcado en una de las calles más transitadas  de Estados Unidos, afortunados de que las autoridades respondieran con  rapidez, y afortunados de que los aspirantes a terroristas fueran lo  suficientemente torpes como para crear una bomba que no fue capaz de  estallar. 
   Sin embargo, el incidente fue suficiente como para  sacudir los nervios de cualquiera y provocar una frenética  investigación. 
   El presidente Barack Obama habló por teléfono el  lunes con el vendedor de bolsos de mano Duane Jackson para felicitarlo  por alertar a las autoridades. La Casa Blanca dijo que Obama agradeció a  Jackson por su actitud vigilante y diligente que impidió graves  problemas.         

