RECHAZA SE ELIMINE PÁRRAFO AL PRÓLOGO DEL LIBRO DE RENÉ FORTUNATO
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La ex vicepresidenta de la República, Milagros
Ortiz Bosch, instó al presidente del Senado, Reinaldo Pared, a no
condicionar el apoyo a una segunda edición del libro “La Democracia
Revolucionaria”, del cineasta René Fortunato, a la eliminación de un
párrafo del prólogo escrito por Frank Moya Pons, por considerarlo
ofensivo a Juan Bosch.
La sobrina del ex presidente Bosch consideró contradictoria la postura del senador y secretario general del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), tras señalar que el fundador de esa organización política fue un promotor del libre debate de las ideas, no de la censura del pensamiento de los demás.
Sostuvo que el debate de las ideas exige que estas sean expuestas, “por eso me parece que es un contrasentido y contraproducente, contrario a lo que fue la visión de Juan Bosch desde el punto de vista de la cultura”.
“Los miembros del Partido de la Liberación Dominicana tienen que estar muy abiertos a escuchar debates, a escuchar diferentes tipos de análisis, pero nunca en la vida pedirle a nadie que suprima un párrafo o declaración”, destacó.
Aclaró que no ha leído con detenimiento el prólogo ni la obra de Fortunato y que se ha informado a través de las reseñas periodísticas luego de que LISTÍN DIARIO destacara lo dicho por el historiador Moya Pons, de que lejos de pactar con sus adversarios, Bosch continuó enfrentándolos desde el poder, denunciándolos, irritándolos y provocándolos, llegando incluso a anunciar desde antes de tomar posesión, y varias veces durante la Presidencia, que sus enemigos planeaban tumbarlo, y vaticinando que, efectivamente, terminarían derrocándolo.
El poder
Ortiz Bosch consideró que para analizar al Juan Bosch del año 1963 hay que tener la idea de cómo él concebía el Poder y la experiencia que los gobernantes que pensaban como él tuvieron en Latinoamérica, ya que ninguno pudo sobrevivir en el ejercicio de la Presidencia. Explicó que Juan Bosch le dio mucha importancia a los aspectos con que cuenta un gobernante para impulsar los cambios que él pregonaba y para ello hizo énfasis en sus discursos en que la población debía tener mucho amor por la democracia y la libertad de las ideas.
“Yo tengo la convicción de que Juan Bosch explicaba en charlas sistemáticamente las ventajas que la democracia podía darle al pueblo dominicano si creaban las fuerzas, el apego, el amor a la democracia que hacía falta para poder enfrentar la realidad de las fuerzas que se movían en la República Dominicana”, expuso.
Recordó que Bosch ganó la Presidencia con la emoción que significó la llegada del Partido Revolucionario Dominicano, pero arrancándole el voto del miedo a los trujillistas sin llegar a una alianza con los jóvenes de la izquierda.
Entiende que Bosch buscó con sus charlas y su forma de ver la política crear las fuerzas que resistieran en un momento determinado la respuesta de las fuerzas conservadoras establecidas en el país, y las que querían hacerse dueñas de lo que confiscó el régimen del dictador Rafael Trujillo.
La sobrina del ex presidente Bosch consideró contradictoria la postura del senador y secretario general del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), tras señalar que el fundador de esa organización política fue un promotor del libre debate de las ideas, no de la censura del pensamiento de los demás.
Sostuvo que el debate de las ideas exige que estas sean expuestas, “por eso me parece que es un contrasentido y contraproducente, contrario a lo que fue la visión de Juan Bosch desde el punto de vista de la cultura”.
“Los miembros del Partido de la Liberación Dominicana tienen que estar muy abiertos a escuchar debates, a escuchar diferentes tipos de análisis, pero nunca en la vida pedirle a nadie que suprima un párrafo o declaración”, destacó.
Aclaró que no ha leído con detenimiento el prólogo ni la obra de Fortunato y que se ha informado a través de las reseñas periodísticas luego de que LISTÍN DIARIO destacara lo dicho por el historiador Moya Pons, de que lejos de pactar con sus adversarios, Bosch continuó enfrentándolos desde el poder, denunciándolos, irritándolos y provocándolos, llegando incluso a anunciar desde antes de tomar posesión, y varias veces durante la Presidencia, que sus enemigos planeaban tumbarlo, y vaticinando que, efectivamente, terminarían derrocándolo.
El poder
Ortiz Bosch consideró que para analizar al Juan Bosch del año 1963 hay que tener la idea de cómo él concebía el Poder y la experiencia que los gobernantes que pensaban como él tuvieron en Latinoamérica, ya que ninguno pudo sobrevivir en el ejercicio de la Presidencia. Explicó que Juan Bosch le dio mucha importancia a los aspectos con que cuenta un gobernante para impulsar los cambios que él pregonaba y para ello hizo énfasis en sus discursos en que la población debía tener mucho amor por la democracia y la libertad de las ideas.
“Yo tengo la convicción de que Juan Bosch explicaba en charlas sistemáticamente las ventajas que la democracia podía darle al pueblo dominicano si creaban las fuerzas, el apego, el amor a la democracia que hacía falta para poder enfrentar la realidad de las fuerzas que se movían en la República Dominicana”, expuso.
Recordó que Bosch ganó la Presidencia con la emoción que significó la llegada del Partido Revolucionario Dominicano, pero arrancándole el voto del miedo a los trujillistas sin llegar a una alianza con los jóvenes de la izquierda.
Entiende que Bosch buscó con sus charlas y su forma de ver la política crear las fuerzas que resistieran en un momento determinado la respuesta de las fuerzas conservadoras establecidas en el país, y las que querían hacerse dueñas de lo que confiscó el régimen del dictador Rafael Trujillo.
